martes, 22 de mayo de 2012
El otro cielo.-
No compartir un egoismo sistémico, de una sociedad enferma, tiene complicaciones, en este mayo fueron agravios los que fueron cayendo de las copas de otoño, la ingratitud en los necios asoman una idea funcional de infinito, la planicie efímera de la mente humana, se usa para correr velozmente hacia tu sillón, con forma de culo.
La jungla tiene olor a hotel alojamiento con respiración de cebolla, se conjuga con olor a camperas sucias y un aire viciado por residuos del residuo petrolero, la nariz seca, y el estomago fètido. El sentimineto que detecta la presencia de la jungla es de languidez, irritacion ocular, ansiedad, y cansancio.
Sin ir mas lejos éste es el máximo y mas violento asesinato cotidiano, la falta de sensibilidad bilateral arroja como método a los jibaros insaciables que hoy se creen personas.
Aunque resulte cursi, existe otro mundo, el mundo de los que nunca han vivido en la jungla, un mundo de flores, luces y colores, un mundo de niños jugando y cantando canciones de ronda, El mundo que se construye con el otro, mas allá del imperio de Wessex, mas allá de cualquier idea de agresión, existe una repleta pileta de felicidades, dentro de cualquier mundo que nos planteemos, este mundo esta embarazado de otro mundo posible, habrá entonces que esperar el punto exacto para darlo a luz.
jueves, 10 de mayo de 2012
La muerte escandalosa de la etica
Perdiendo, la hermosa posibilibad de ser feliz, sin querer uno se concentra en cosas ingratas, de repente te encontras convenciendo a tapias, guardando tus alas, solo por temor a que las vean. Tu vida misma es contener la respiracion 8 minutos, y aunque trabajes fuertemente, tu esfuerzo es inocuo.
Los tiempos vienen, violentos, decian y los perros, cada vez tienen mas hambre, y uno se parece mucho mas al hueso que al plato.
Tanta presion, tanto desenfado, tanta agresion, no puede pasar de lado. El desgate de nuestra vida, el dolor de todos los que han sufrido, el violento acontecimiento cotidiano, nos controla.
La muerte escandalosa de la etica, en manos de los hombres, y el amor olvidado, los sentimientos validos: La ira, el odio, la envidia, y como concecuencia la violencia.
Ser parte de todo esto, es ser nada.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)