Hay un balcón muy florido, una pantalla de escenas que se repiten.
Hay unos colibríes picando una rosa china, hay una montaña de sugus confitados de colores, y un Bisnike nevado.
Hay una plaza con sol, un banco con un rio, hay una mañana en bici, y una siesta sin dormir, hay una hermana a quien amo, y un hermano que necesito, hay una travesura y unos juegos con un rompecabezas de Blancanieves, hay una pelota de futbol, una jaula con pájaros, una rodilla embarrada y un balde de bombitas de agua, hay una montaña de días, que amo y ame con inocencia, está el olor al colegio, que todavía recuerdo.
Hay una tarde y un rompecabezas que hice con Peter, hay un juego de Pool, con mi abuelo del alma.
Hay un jardín de mujeres, un montón de aventuras, hay amigos, colores, proezas y sueños.
Hay una mañana y también una noche.
Hay un velador que gira, con dibujos de hijitus, están las sillas, la cocina, Popeye, los autos, el hombre araña, y ahí en algún lados entre todas esas cosas, estabas vos y yo lo sabia.
Te extraño.
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